Ciudad Juárez, Chihuahua.– Hay ocasiones en las que para solucionar un problema que afecta a toda una comunidad solo se necesita que haya una persona que dé el primer empujón para que los eventos que terminarán por resolverlo acaben ocurriendo. La primaria Valle del Sol y la secundaria federal 22, ambas en el mismo terreno de la zona, son uno de esos casos en los que la organización vecinal logró dotar de espacios educativos a una colonia.
“El proceso inició aproximadamente en 2018, si no es que antes. Se estaba solicitando un predio, que es el que se ubica en la Pascual Ortiz Rubio y avenida San Bernardo, para hacer una escuela. La intención inicial era una preparatoria. En aquel tiempo Educación nos comentó que aquí no era necesaria una preparatoria, sino una secundaria”, recordó Zaira Castillo, vecina de la zona.
En ese sentido, Claudia Arreola, coordinadora de Participación Ciudadana en Plan Estratégico de Juárez –quien dio acompañamiento a través de la Red de Vecinos–, agregó que el primer obstáculo que tuvieron que sortear fue el de convencer a las autoridades de que se necesitaba infraestructura pública en la zona de Valle del Sol.
“El acompañamiento empieza sin pensar que era para escuelas. Veíamos muchas necesidades. En el IMIP, principalmente, nos decían que no había necesidad de edificios públicos ahí. Que no se necesitaban centros educativos, porque la gente podía pagar. Que no se necesitaban parques porque todos los fraccionamientos tenían parques”, comentó.
Posteriormente se dieron cuenta de que en las sesiones de Cabildo se estaban enajenando a título oneroso diversos terrenos que eran donación municipal para espacios públicos. Por lo tanto, empezaron a ubicar los demás de la zona. Así fue como dieron con el que posteriormente se convertiría en la biblioteca Bonanza y el que se convirtió en las escuelas.
Conseguir el terreno… la segunda lucha
De acuerdo con Claudia Arreola, una comisión de regidores proyectaba que el terreno de las calles Ortiz Rubio y San Bernardo iba a ser una especie de “segundo Chamizal” enfocado para las y los habitantes de Valle del Sol; sin embargo, en una sesión de Cabildo se donó la tercera parte del predio a una iglesia, por lo que decidieron poner manos a la obra para aprovechar el espacio restante.
“Nos acercamos a Educación y preguntamos qué se necesitaba para poner una escuela. Nos dijeron cuántos metros se necesitaban. Educación hizo la solicitud y los vecinos a la par hicieron un sondeo en redes. Se inició el proceso ante el Cabildo con la solicitud de SEECH para el terreno. Nos dijeron que el terreno era demasiado grande para una secundaria, pero platicando con la subsecretaria de Educación en aquel entonces, sugirió hacer ahí la primaria, porque habíamos proyectado la secundaria en ese terreno y hacer una primaria en la Sarzana. Finalmente decidimos solicitar el terreno para las dos escuelas, y así se hizo”, narró.
Otro problema se relacionó con el papeleo para tramitarlo. Incluso se tuvo que pedir una prórroga, pues el tiempo para la escrituración del predio se venció.
Valle del Sol: generar comunidad a través de dos escuelas
Aunque parte de la Agenda 2030 contempla garantizar una educación inclusiva, equitativa y de calidad y promover oportunidades de aprendizaje durante toda la vida para la población de Juárez, para las familias de Valle del Sol lo común era tener que buscar en zonas ajenas espacios para sus hijas e hijos, pues las opciones cercanas siempre estaban saturadas:
“Aquí tenemos la secundaria técnica 44, que está en Satélite, que hasta la fecha está totalmente saturada. En la mañana hay grupos de 50 alumnos y en la tarde hasta de 40. Entonces, la calidad educativa se reduce con el número de estudiantes. Muchas familias se quedaron sin opción de educación pública, otros optaban por escuelas privadas, pero muchas veces no está tan fácil.
“¿Cómo le hacía la gente?, o en la 44 alcanzaban lugar, o los colegios privados, o nos trasladábamos a veces hasta la Zona Centro, Pradera Dorada o Zaragoza”, explicó.
Por ello, el sentido de pertenencia se compromete. Sin embargo, Zaira comentó que a raíz del arranque de la secundaria federal 22, esa dinámica comenzó a invertirse.
“Me satisface ver los vínculos que generan los niños. El otro día lo comentaba: el niño del fraccionamiento de enfrente y el de acá, jamás en la vida se iban a hacer amigos. Ahora gracias a la secundaria están interactuando, se conocen, tienen cosas en común y han hecho amistades muy fuertes. Se juntan, andan de casa en casa, de fraccionamiento en fraccionamiento, y se estrechan los vínculos”, explicó.
La secundaria federal 22 empezó a operar desde el ciclo escolar 2022-2023, y aunque la primaria iba a arrancar a la par, al final se pospuso porque no se juntó el número mínimo de estudiantes. Ahora están en periodo de inscripciones y únicamente habrá clases en el turno matutino.
La solución en Valle del Sol: la organización vecinal
De acuerdo con Arreola, todo el proceso que derivó en la existencia de estos espacios educativos en Valle del Sol no habría sido posible sin la organización de los mismos vecinos.
“Todo el trabajo fue de los vecinos. SEECH les regaló mantas y pósters, pero todo el trabajo que falta es administrativo… Ha sido muchísimo trabajo de los vecinos, volantearon en los kínders, en las tiendas, en los supermercados, fue mucho trabajo”, comentó.
Ahora el objetivo de las y los vecinos está en edificar un kínder, y como consecuencia de esto, gente de otros sectores está buscando el acompañamiento de Red de Vecinos para poder gestionar sus espacios educativos.
